No es lo mismo

De pequeña todo era lo mismo:
un helado de frutilla
o pan con mantequilla,
los cuentos de papel
a la orilla del brasero
¡o la lluvia en la cara
esos largos aguaceros!

Más tarde creí que lo mismo era
un beso robado, un te quiero;
o bajo el paraguas una larga espera.

La canción, la mirada
una simple declaración;
quise creer tantas cosas,
¡Casi pierdo la razón!

Más grande comprendí
que no es lo mismo
amor a primera vista
que a primera risa.

Que no debo confundir
perdón con reincidencia,
estupidez con resistencia;
voluntad y abuso de confianza;
lealtad
incluso en las palabras.

Ahora ya mayor comprendo
que no es lo mismo
pan con mantequilla
que falta de compañía;
té con canela
que una larga espera;
a solas vivir
que todo permitir;
quererse y aceptarse
que a todo resignarse;
aguardar el amor
y no tener valor;
paciente esperar
no saber qué pensar,
que la verdad es una
y las mitades sobran,
que la confianza
es inmensa
pero la mata
la incoherencia,
que creer en el amor
nunca debe causar dolor.

Después de tantas palabras
vertidas en el papel
nada es lo mismo
si lo comparo con el ayer.






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