DOBLE FAZ

Cuando vienes,

llenas de pájaros

las esquinas vacías  

de mi  corazón.

Bandadas 

de  alucinado  vuelo

rozan nubes  

reconocen con su  canto 

un sabor que no es.

Recuerdos

enredan  alas  insaciables,

atajan el  vuelo, 

apagan su luz.

Son tragadas

por  el vórtice

de la presencia  ausente.

Se arrinconan, 

ciegas de esperanza.

Cuando vienes,

el reloj marca 
los tiempos de tu mirada.

Desconozco esa voz

que baja de los árboles

hasta mi boca

para  gustar en silencio

su inadvertido sabor.

Cuando vienes,

me enmudecen

los latidos

de tu corazón delator.

Intento descifrar

razones,

pretendo  su  liberación,

sólo para vivir

mi  esencia única 

y verdadera

en un segundo sin fin.

Porque cuando vienes,

me aparto de mi ruta

para ir a tu encuentro.

Imágenes

ahogo en mi obstinado puño

y dejo el  olvido  en tus manos

para no desconocerlo.

Y recuerdo

que tengo  un nombre

para  masticar  hasta diluirlo

en ese beso

que no es  tuyo ni mío.