CÓMO SERÍA...
Cómo sería
-me pregunto de pronto-
como sería
sobre mí, tus ojos.
Como sería
tu palabra y la mía,
tu voz siempre calma,
tu historia y la mía.
Como sería
complicidad y compañía,
tardes de ocio
todos los inviernos,
tú, junto al piano,
yo y mis cuadernos.
Y allá en tu tierra
juntas las alegrías
y bajo el jacarandá
charlas compartidas.
Como sería
tu beso en mi frente
tu mano, mi guía;
tu voz, valle agreste,
por milagro, melodía.
(Y en el hueco de tu abrazo
mi canción detenida)
A veces sueño
y a ratos pienso:
cómo sería
una historia dividida
quebrando mapas,
cruzando umbrales
pendientes de otras vidas.
Como sería.
Y la incógnita se
acerca
abriéndose camino
derribando puertas.
Cruza callada, atajos,
llueve ansiedad sobre
los pasos,
o ilumina silencios,
enciende albas,
en el secreto de la noche
y en cálidas madrugadas.
Porque el arco de tus manos
y el borde de tu boca,
y el centro de tu
canto
y todo lo que tu alma
toca,
me llama con insistencia
me susurra su
melodía,
me atrae con sutileza
me abraza como lo haría,
en un segundo
infinito
del tiempo sólo un instante
que cruza noches
vacías
acaso fronteras distantes
para guardarme por siempre
desde el origen fortuito
tendido de cielo a cielo
en tiempos inmemoriales.
Cómo sería,
-Me pregunto a veces-
Cómo sería…
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