Tarde
se hacen caminos.
Tarde
bordeo tu ruta.
Tarde
mis pies osados
dibujan
otros horizontes.
Tarde
florecieron mis ojos.
Tarde
su sonrisa
se bebió la mía.
Tarde.
Y sin embargo
el reloj marca
las horas
sin espera.
¡Y mi alma que cree
apenas amanecer!
Es tarde...
¡y yo sin saberlo!
Comentarios
Publicar un comentario