Horas rodando.
Tristeza amortajando sueños.
Se arrastran
de tiempos sin memoria
dos lágrimas de océano.
Dos sentencias azules.
Miradas redondas
de palabras sin eco
atardecen en ojos
ajenos a sus ojos.
La noche
convierte sonrisas
ficticias al amanecer.
Comentarios
Publicar un comentario